viernes, 14 de noviembre de 2014

PAISAJE ROJO Y AÑIL



















Se han teñido de rojo los caminos,
se han vestido los plátanos de invierno,
han llegado las brumas y los vientos
a pintarte una mueca pesarosa
bajo el mustio clavel de tu sombrero.

¡Triste y árido  tiempo de violetas
que ha borrado la luz de tu sonrisa,
que ha cargado de peso tus maletas,
que ha cubierto de añil las esperanzas!

Se han vestido los plátanos de invierno,
han llegado las brumas y los vientos.
Homo homini lupus, te enseñaron,
mas tú siempre creíste, ingenuo payaso,
que fuimos forjados con la materia de los sueños,
que brotaría polvo de estrellas
cuando el cierzo soplara en la fragua.

Ahora piensas que fueron vanos tus anhelos,
tu fe en el hombre y la mujer,
a menudo seres de ciega codicia
cuando no insolidarios y egoístas.

Se han teñido de rojo los caminos,
se han vestido los plátanos de invierno.
Hay días que apenas te sostiene
la insaciable curiosidad que te acompaña.
Te refugias en el silencio,
en la magia del amor, bálsamo humilde,
en el calor de la amistad que nos reúne
en estas noches de casi invierno.

Se han vestido los plátanos de invierno,
han llegado las brumas y los vientos
y ahora sabes que sólo te quedarán,
como últimos, desesperados recursos
que se alzarán contra el abismo,
la poesía, eco de la fábula del tiempo,
y la siempre amable y bondadosa
soledad de los caminos.



viernes, 31 de octubre de 2014

FÉRTIL SILENCIO


















Déjate fertilizar por el silencio,
déjate abrazar por el silencio,
escucha su música armoniosa,
nútrete de su límpido manantial
y calla, calla cuanto puedas.

Es el silencio una conquista,
un fruto de la libertad,
un don precioso y devaluado,
una humilde y a veces dolorosa prueba
de amor y de respeto.

Las palabras son puentes que nos hermanan
pero también arcanos impenetrables
con su endiablada polisemia,
con su ironía indescifrable para muchos
que es  daga cruel de doble filo,
con su metafórica carga de intuiciones
e inefables sentimientos.

Ya has hablado demasiado, calla ahora,
limítate a escuchar,
no pongas ningún afán en explicarte
y deja que el silencio obre sus prodigios.
No pretendas que todos te entiendan
bastante tienes con entenderte a ti mismo.

No pretendas que te entiendan
aquellos a quienes amas
sino que tus palabras les ayuden
a entenderse a sí mismos.


miércoles, 16 de julio de 2014

YA SÉ QUE TE DUELE VERME TRISTE



















YA SÉ QUE TE DUELE VERME TRISTE
y que calladamente me reprochas mi distante cinismo;
que cuando menos lo esperas te salpica
la hiel de mi ironía o los torrentes ácidos de mi amargo humor.

Pero qué quieres,  ahora apenas fumo, apenas bebo, 
ya no alargo los días con las ansias de otro tiempo,
hace mucho que no emprendo un largo y fatigoso viaje:
la vida no necesita ayuda para matarme poco a poco.

A veces me reconozco vacío de ilusiones y proyectos,
muerto en vida, sí, como tantas veces reproché a otros.

Está siendo tan duro y triste este verano otoñal
que al menos evito contaminar a otros con mi vírica desolación
y corro a buscar refugio en la apaciguadora sinfonía de las plantas,
en la locura del cierzo que despeja mis sienes,
en el siempre amable sosiego de las aguas del Ebro.

He pasado la tarde tumbado en la hierba
contemplando el vuelo alegre de los cormoranes.

También yo  quisiera elevarme y volar hacia el horizonte infinito,
cruzar esta tierra árida y  callada surcando una vez más
el aire limpio de la libertad y de la poesía
hacia ese mar que dicen nos espera allá a lo lejos.

Volar es la única forma de salir del laberinto
¿Pero qué  hacer cuando la realidad se conjura contra los deseos,
cuando quienes más te quieren te enlodan las alas?


martes, 11 de marzo de 2014

NO HAY LUGAR EN EL MUNDO


























NO HAY LUGAR EN EL MUNDO para mi mundo,
ha escrito el poeta Ángel Guinda.

Tal vez el Amor (y con él la belleza, la empatía,
todo lo noble que hay en el ser humano)
no sea sino un vislumbre extraño,
una rara anomalía que apenas lleva en la tierra
quince o veinte mil años tratando de abrirse paso.

Hace tiempo que sospecho que no seremos capaces
de hacer que Gaya se lo apropie de forma definitiva
y el planeta acabará expulsándolo como se expulsa a un cuerpo extraño,
como el cuerpo rechaza el corazón trasplantado que le da la vida,
aunque ello suponga su propia aniquilación.

No hay lugar en el mundo para mi mundo.
Pienso en ello cuando paseo las ruinas de esta Ciudad del Viento
en la que después del desastre apenas ya queda nada
de lo que tanto he amado;
cuando veo a tantas personas doloridas al borde del abismo;
cuando en tantos días aciagos compruebo que son los cínicos,
los codiciosos, los bárbaros, los violentos,
los que menos respetan la Vida y la belleza,
los primates más evolucionados,
los que más éxito tienen de nuestra especie.

No hay lugar en el mundo para mi mundo,

intuición que se vuelve certeza
al recibir mi carne la ardiente dentellada de las balas
disparadas desde mi propia trinchera.

No hay lugar en el mundo para mi mundo
o, por mejor decir, no quieren que haya lugar
en el mundo para tu mundo, poeta,
porque están, compañeros, ganándonos la partida.

Esa es la realidad perturbadora que nos erosiona cada día,
y es esa revelación algunos días tan triste,
tan inquietante,que hace falta mucho amor y mucha convicción
para apretar los dientes y seguir adelante.

sábado, 15 de febrero de 2014

RESURRECCIÓN
















En esta desolada estación de la tristeza,
cuando la malla amarga de los días
dolía más que la de tu vientre,
cuántas veces te salvó un pequeño milagro:
una llamada amistosa y oportuna,
el destello verde y las cortantes alas
en la solapa de su bata blanca,
el gesto decidido y la sonrisa amable
de una mujer valiente,
su  mirada cómplice y tierna.


Te dijiste entonces
que vale la pena seguir adelante
aunque sea amontonando frágiles
y fútiles, cabronas esperanzas,
y escuchaste  el rumor del mar que fluye en tus venas,
el empuje atávico de esa voz ahora
nublada por el dulce sopor de los narcóticos,
y te rendiste a la evidencia:
déjate llevar,  ama y déjate amar,
no importa a dónde, no importa de qué manera.


Porque tu  vida es un soplo de viento
y todavía has de volar, hermano,
has de volar muy lejos.