A Petra Kelly
in memoriam
Este viento otoñal que viene del norte
nos trae recuerdos de otros días de Octubre,
de tu casa de Bonn vacía y
triste,
en otro tiempo refugio de soñadores
que amaban tu energía y tu ternura,
del martirio amargo de tu soledad, Petra Kelly.
Treinta años de lucha quebrados en un instante,
la esperanza verde dividida y derrotada,
por eso la euforia de los
traficantes de la muerte,
por eso los líderes de las
naciones se atrevieron
a tapar en Río de Janeiro sus vergüenzas
con grandilocuentes y vacuas palabras,
porque has perdido, Petra, porque
has perdido
y sabes bien que tu final se acerca.
Piedra del Sol,
filósofa de la paz, el amor y la ternura,
con el viento helado que viene de Alemania,
de tu hermoso país que sólo nos trae desdichas,
nos llegó la noticia pavorosa de tu muerte,
de tu soledad, tu hastío y tu derrota.
Seductora Piedra de Fuego,
quisiera poder afirmar
que tu vida no fue en vano,
que tu luz refulge hoy
en miles de seres nobles
que de ti aprendieron y aprenden
a pensar con el corazón,
que en tu nombre vivimos
y en nuestras vidas vives,
Petra Kelly.
Pero qué difícil a veces
ver la luz que brota entre las sombras,
la esperanza naciente que a la
muerte
sobrevive.
No hay comentarios:
Publicar un comentario